Una fuerte conmoción sacudió al país tras conocerse el atentado contra el senador Miguel Uribe Turbay, quien fue atacado a disparos durante un evento público en la localidad de Fontibón, Bogotá. Según las primeras versiones, el senador fue impactado por dos de los seis disparos realizados por un sicario mientras ofrecía su discurso ante la comunidad. El político fue auxiliado de inmediato por su equipo de campaña y su esquema de seguridad, y trasladado a un centro asistencial donde recibe atención médica urgente.
Durante el ataque, uno de los presuntos autores fue capturado en el lugar por parte del cuerpo de escoltas del senador. En un video que circula en redes sociales se observa al agresor reducido en el piso, mientras miembros de la fuerza pública lo interrogan. En medio de la tensión, el joven comenzó a hablar: “Yo les voy a dar los números. Déjenme levantar y déjenme darles los números”, expresó, sin revelar directamente quién lo contrató. Según las autoridades, habría recibido una llamada telefónica con la orden de disparar contra Uribe Turbay.
El capturado fue identificado como J.S.R.C., un menor de tan solo 14 años, cuya situación familiar es compleja: su madre falleció a los 23 años y su padre reside en Polonia. El adolescente vive con una tía en la localidad de Engativá. Ingresó cojeando a la clínica y se encuentra herido, en espera de una intervención quirúrgica. Las autoridades continúan recabando información para esclarecer la cadena de mando detrás del atentado.
El alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, se pronunció de inmediato: “El senador Miguel Uribe está siendo atendido de urgencia (…) Toda mi solidaridad con el senador y su familia”. La red hospitalaria de la capital fue puesta en alerta y la zona del atentado permanece bajo fuerte vigilancia policial mientras avanzan las labores investigativas.
Hasta el momento, el estado de salud del senador es reservado. Se prevé su traslado a otra unidad médica para continuar con su tratamiento. Las autoridades trabajan intensamente para esclarecer quién está detrás del intento de asesinato, mientras el país exige justicia ante este hecho que pone en riesgo la vida democrática y la seguridad de sus representantes.